137. Post inconcluso...

Silencio forzado. tinta vacía y par de días lo que tardé en volver a conseguirla.

Desesperación ante la necesidad -locura- de no poder escribir más que con pluma fuente, o con una pluma que no sea bolígrafo.

Finalmente invertir en la tinta a pesar del presupuesto tan raquítico. Gasto.

Recuperar en gran parte la cordura.

Pensar que el mundo personal va bien cuando por momentos es más frágil que un envase de cristal.

Escapar de las culpas. Escapar de los duelos. Ser capaz de argumentar en el momento adecuado. Correr el riesgo de ser honesto a pesar de la molestia que conlleva, del enojo que puede provocar. La desazón del ser estimado en furia. El silencio.

Aprender a ser paciente. Aceptar los NO con dignidad. Procesos de fondo no del todo claros para los demás, ¿para uno?. Vivir y ser testigos de las montañas rusas individuales. De la sonrisa más bella. De la mueca más cruel.

Un clavado al pasado reciente sólo para descubrirse más fuerte y al mismo tiempo caminar sobre la delgada línea de la melancolía. Conservar el equilibrio.

Algunas personas tendemos a creer que somos las peores del mundo, las más nocivas. Deshechar idea tal. Todos y cada uno de los seres humanos contamos con un lado postivo que nos vuelve únicos. Desenterrarlo.

Despertar con esperanza...